sábado, 23 de agosto de 2014

Yo no podré olvidarte
dejar para otro instante
tu huella en mi guión.
Te prefiero certero
afilado, de obsidianas...

Y ni el más sólido silencio
acallará tu voz en mi entraña...

1 comentario:

  1. El humo se eleva susurrando los gemidos del alma...

    Descontando lo superfluo lo certero se hace letra del espíritu.

    Un saludo

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